NOS SUMAMOS A LA PROTESTA POR LA CAÍDA EN PICADO DE LA EDUCACIÓN
La entrada de la extrema derecha en gobiernos regionales como el de la Región de Murcia está coincidiendo con una caída en picado de los servicios educativos públicos, que apunta a una nueva oleada privatizadora.
En todas las autonomías en las que el PP se ha aliado con la extrema derecha la gestión de la educación está empeorando rápidamente. La política del PP, que es mantener deliberadamente la comunidad en situación deficitaria, y la Consejería de Educación en quiebra técnica, para favorecer solo el negocio privado, se ve agravada ahora por la voluntad de dejar caer servicios como el transporte escolar o los comedores, que son una necesidad para tantas familias.
En la región más de 6.000 familias se están quedando sin transporte escolar, están teniendo que faltar a sus trabajos por ello. Se están vulnerando derechos para favorecer subcontratas privadas, y por eso el PP se niega a emitir una orden de ejecución forzosa para solucionar la emergencia. Se está insultando en la cara a la comunidad educativa, que tiene que aguantar al diputado Albadalejo del PP diciendo que no hace falta transporte porque estos días “no se hace nada”. El consejero Víctor Marín está desaparecido y no da explicaciones. Como respuesta, las familias de Cartagena y sus colegios están teniendo que armar protestas hoy mismo. También el IES San Isidoro se levanta: “los buses somos las madres”, gritan.
Tampoco hay voluntad de que un servicio básico como los comedores funcione nada más que como servicio de pago en los centros privados subvencionados. Seguimos a la cola de España en becas de comedor, que no llegan ni al 3%; no hay plazas, no hay comedores suficientes, y en los que hay el personal que atiende se está recortando drásticamente y los menús se están encareciendo. Es una ruina deliberada para privatizar. Además las familias de la pública se han encontrado en septiembre con que las nuevas aulas 0-3 están sin terminar en muchos centros, porque el dinero de la UE no ha llegado a las empresas que las debían montar, algo que no está sucediendo en los centros de pago.
Los Alcázares sangra por la educación de sus hijas e hijos, que ya no tienen ni barracones en los que hacinarse. Ahora no solo tenemos docenas de barracones en la región, sino que se colocan en ramblas, como en La Unión, o directamente los retiran aunque estén útiles, para que las empresas pongan otros nuevos iguales y se lleven más dinero público. ¿Quién se está lucrando? Mientras tanto, gran parte del alumnado está en casa, de manera ilegal, recibiendo supuestamente clases “online” para las que no hay ni internet en los centros, algunos de los cuáles no han podido ni hacer la matriculación en condiciones, a pesar de ser, según la administración, “centros digitales”.
Todo ello se suma a la falta de personal, a las ratios inasumibles, al colapso climático y de infraestructuras que sufren los centros, y en definitiva al saqueo de los fondos para educación por parte del sector privado, que es la única política que la derecha y la extrema derecha conocen.
Por eso STERM se suma a la protesta convocada por la FAPA, y secundada por otras federaciones de madres y padres, el martes 19, en la Consejería de Educación a las 18:30.
Es hora de decir ¡BASTA DE PRIVATIZAR Y DESTROZAR LA ESCUELA!