DENUNCIAMOS LA PRIVATIZACIÓN ENCUBIERTA DEL TRANSPORTE ESCOLAR
STERM se suma a las peticiones de dimisión del consejero de educación.
Víctor Marín, absolutamente cuestionado y sin Director/a de Infraestructuras, está ganando tiempo anunciando grupos técnicos y ofertas que no prosperan, mientras el PP bloquea en la Asamblea Regional todas las propuestas de solución.
La entrada de VOX en el ejecutivo coincide, como en otras CCAA, con una caída en picado de la gestión de lo público. El rechazo de López Miras a aceptar las soluciones que se le proponen en la Asamblea indica que se están dando pasos para la próxima supresión del servicio de transporte escolar, que pasaría de un modelo de subcontratación absolutamente fracasado, a otro consistente en dejar esa necesidad enteramente en manos de las familias. Extrema derecha es igual a extrema privatización.
El desastre de planificación económica del PP, que mantiene la CARM en situación deficitaria, con los distintos servicios en quiebra técnica, es campo abonado para dejar tiradas a las familias y a los centros públicos. Tanto lo sucedido con los comedores escolares, cada vez más inaccesibles y deficientes, como la caída del transporte escolar, son síntomas claros de que el modelo de subcontratas de servicios públicos se le ha ido de las manos a la derecha regional. No es viable ni sostenible.
Vemos cómo las niñas y niños se quedan sin autobús y sin acceso a un servicio de comedor escolar decente. Andar por el arcén de una carretera y que luego te sirvan literalmente “medio plátano” en el comedor es un MODELO FALLIDO, no meramente un problema de “improvisación” o falta de previsión. Situación que se agrava aún más con los centros de educación especial, por la escasez endémica de empresas que oferten servicios de transporte especiales para niñas y niños con problemas graves de movilidad. Sencillamente, no es un servicio que se pueda subcontratar. No todo debe ser objeto de negocio.
¿En qué momento hemos asumido el disparate de que en absolutamente todo los servicios públicos tengan que estar en manos de empresas? Lo normal, lo que dictan la sensatez y la buena planificación, es que las subcontratas se usen para aspectos puntuales, y de los servicios públicos se ocupen trabajadoras y trabajadores públicos. Empleo de calidad que de verdad atiende necesidades esenciales, y cuyo valor social, fiscal y económico supera al de los trabajos basura subcontratados.
Las empresas se niegan a trabajar en pérdidas y exigen la derogación del convenio, las familias insisten, con razón, en que se están violando derechos fundamentales como el acceso a la educación en condiciones de igualdad. Denuncian que ya hay madres que están en riesgo serio de perder sus trabajos por tener que ocuparse de lo que la administración debía estar haciendo. Mientras tanto, el Gobierno Regional del PP se ahoga en sus propias contradicciones: responde que está atado por la ley y por el convenio marco, reconoce que el autobús escolar es un servicio esencial, pero al mismo tiempo se niega a emitir una orden de ejecución forzosa para mandar al alumnado a sus centros mientras negocia con las empresas.
Si a todo esto sumamos la escasez de vehículos a nivel estatal, la conclusión es que el modelo de subcontratas está quebrando, y que hay servicios esenciales que no pueden subastarse por paquetes al mejor postor, como con los comedores o las líneas de transporte escolar. Reclamamos la única solución posible: reconversión pública de los comedores escolares y del transporte, con vehículos de parque público, con comedores públicos y personal público. Hacer negocio con ciertas cosas es un modelo fallido.